Tumores benignos.
Los tumores benignos cutáneos son lesiones que se forman en la piel y en sus estructuras anejas, como cabello o uñas. Entre las lesiones más comunes destacan los nevus intradérmicos, las queratosis seborreicas, los fibromas y los papilomas.
Existen múltiples variedades de tumores benignos. Por esta razón, es necesario que el especialista evalúe de forma minuciosa cada una de estas lesiones y descarte que se trate de afecciones con una mayor gravedad.
Actualmente, el láser nos permite eliminar los tumores benignos de la piel de forma rápida y eficaz y sin apenas cicatriz. El Láser Erbio nos permite su eliminación rápida y prácticamente sin cicatriz visible, incluso en lugares difíciles como la punta de la nariz, el párpado o los labios.
Los angiomas y las malformaciones vasculares se producen por dilatación de capilares, venas o arterias cutáneas y a veces en órganos internos. Producen malformaciones a veces con impacto estético severo, sobre todo si afectan a la cara. Pueden ser congénitos, aparecer en los primeros meses de vida o en la edad adulta. En la actualidad el tratamiento solo con láser o combinado con fármacos orales o intralesionales, produce la eliminación prácticamente total de muchos de ellos, evitando complejas intervenciones si se tratan precozmente.
Los láseres vasculares mas eficaces y de los que disponemos, son el LÁSER PDL, el LÁSER de 532nm de pulso largo y alta energia y el LÁSER Nd:YAG de pulso largo, para las lesiones vasculares profundas. Todos estos láseres se emplean normalmente en consulta y son perfectamente tolerados con anestesia tópica.
Los papilomas (producidos por un virus que afecta a las células epiteliales) y las verrugas (causadas por el virus del papiloma humano)son tratados eficazmente con láser combinado con productos tópicos de aplicación domiciliaria